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Hoy comemos fuera. Una vez o dos veces durante el fin de semana solemos comer o cenar fuera. Qué osadía pensará la mayoría, vamos los cuatro, pero nos puede más hacer planes y agotarnos que quedarnos en casa.
Cuando llego a la mesa y recuerdo cómo dejamos el suelo del último restaurante o el ruido que formamos se me van quitando las ganas poco a poco. Cuando se cruzan los astronautas con sus "yo croquetas", "yo patatas", "yo hamburguesa".... Pienso, quién nos mandaría. Esto acaba así: ruido, nervios y comida poco sana....
La cosa se complica cuando un amable camarero dice eso de: aquí no tenemos tronas. Lo que nos faltaba.
Amélie Lafore. Barcelona |
Mira, los fines de semana son para descansar, para
no estresarnos, para disfrutar de los niños... Y nos metemos en esto. Pero creo
que otra realidad es posible. Que cada vez se tiene más en cuenta a las
familias, que los niños no molestan tanto, señor; que poco a poco se empiezan a
incluir zonas kid's e incluso algunos restaurantes piensan en la calidad de los
platos para los pequeños.
Hoy queríamos hablaros de eso. De menús saludables y
espacios para niños. Desde aquí nos hacemos eco del Manifiesto mammaproof. Poco a
poco iremos conociendo lugares donde sentirnos bien, comer sano e incluso
llegar a disfrutar del momento sin temor a molestar.
Es
verdad que la educación del estómago empieza en casa pero un sitio donde sólo
oferten rebozados no deja mucho a la elección.
No
vamos a quitarnos culpa. Pedir platos así es lo fácil, de acuerdo; lo rápido y
lo que más les gusta.
Pero un
simple adorno en el plato o camuflar el sabor del pescado también ayuda.
ideasbrillantes |
Será un esfuerzo de todos pero poco a poco lo
conseguiremos. También habrá lugar de vez en cuando para esa comida que el
cuerpo y los niños nos piden a menudo, también, pero la iremos reduciendo.
Que conste que no soy una gran embajadora de la comida cultivada en casa.
Compro lechuga cortada, calabaza en plástico y pollo en filetes pero
sí insisto en que eduquemos a los niños también en la comida y no sólo en
la mesa.
¿Y vosotras, qué pensáis?
¿Nos recomendáis algún restaurante de este tipo?
¡Besos!
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